viernes, 26 de marzo de 2010

Lo tuyo es puro T E A T R O

Hablas de Delibes y recuerdas al gran Paco Rabal diciendo aquello de "Milana bonita, milana bonita".

Y viajas unos años atrás, cuando leíste Los santos inocentes y cuando tu amigo Mauro te llamaba por ese nombre y por ese tono.

Y regresas. Estás en el atril. Y como siempre que estás en un atril, aunque te creas actriz y en la presentación de tu persona hayan acompañado a tu nombre las palabras mágicas actriz y profesora, la pierna derecha sigue temblando. Siempre.
Hay cosas que no cambian.

Y después se te olvida porque ves la ilusión por el teatro en los ojos y en las sonrisas de mucha gente, de gente pequeña.

Y te da igual que te digan que eres la mejor actriz del mundo y que te saquen los colores. O que vengan a darte un montón de besos y un montón de gracias.
Porque lo de antes ha sido bonito.
Porque hemos sembrado la droga del teatro en un montón de gente pequeña.

Y porque es más bonito aún irse con esa sensación a la cama.

1 comentario:

[Yan!*] dijo...

Una drogadicta más...

¿Qué bien, no? Me alegro de que Amelia triunfase hoy =P.